Sí amigos. Y amigas. Esta es mi propuesta para el 11 - S: quema a un sacerdote. Pero no a uno cualquiera. Nononono!
Buscad en las cercanías de vuestra ciudad, pueblo, aldea, barrio o municipio y localizad al émulo local de Terry Jones. Una vez localizado atadlo de pies y manos y amordazadlo. Cuando hayáis conseguido esto llevadlo a un descampado y... que empiece la diversión!
Previamente (aún tenéis dos días) haced un buen aprovisionamiento de Biblias (cualquier versión es buena, hasta la de los Gedeones), Coranes, Torás, Vedas y demás escritos sagrados a vuestro alcance. Amontonad los libros en forma de cono y reservadlo hasta que el religioso en cuestión haya caído.
Una vez tengáis el montículo de papel litúrgico preparado y la ofrenda (es decir, religioso) en vuestro poder, colocad a esta última sobre la primera. Acto seguido acercad una llama a la acumulación de tinta sobre celulosa y apartaos. Que el fuego quema y no queremos daños colaterales.
Y disfrutad. Disfrutad oyendo cómo chilla el energúmeno. Eso sí, para ello es necesario desamordazarlo (¿existe este verbo?) previamente.
Lo triste es que en una hoguera se muere por asfixia y no por la acción directa del fuego carcomiendo y royendo la carne y las entrañas. Que es lo que merecen estos sujetos.
Porque hoy es noticia Terry Jones, un nosequé (pastor, sacerdote, predicador, tontoleches...) que quiere quemar Coranes porque los musulmanes (vulgo "moros") son malos. Y la culpa es del Corán. Con dos pelotas.
Lo lamentable es que este... este... (¿Cómo definirlo? ¿Hombre? ¿Individuo? ¿Sujeto? ¿Ciudadano? ¿Transeúnte?)... esta "criaturita" no es única en el mundo. Hay muchos como él. En todos lados. En todas las religiones. En todas las culturas.
Y son los culpables de lo que tenemos. Porque este club de amigotes nos viene llevando, desde hace siglos, a odios y guerras a su antojo basándose en que su Libro es el Único, su Dios es el Mejor, su Polla es la más Gorda.
Llevan siglos quemando Libros, destruyendo Dioses y cortando Pollas. Cortando nuestras pollas, porque ellos permanecen al resguardo de sus templos y oraciones dictando quién debe morir, cuándo y porqué. Mientras disfrutan de las atenciones, lujos y agasajos que sus fieles les ofrecen.
Como no son personas de pensar, a ninguno de ellos se les ha ocurrido la idea de que puede haber más de un Dios. Tampoco han reflexionado sobre si hay un Dios pero con distintas interpretaciones. Y, por supuesto, no han escuchado las versiones de los demás porque ellos están en lo cierto. Ellos en singular, no como conjunto.
Por no decir que ninguno osa a imaginar que no existe Dios ni los Dioses. En eso sí están de acuerdo. El ateísmo y el agnosticismo debería estar penado (en Irán es delito).
Y es que son un conjunto, por mucho que se lleven a matar. Se llevan a matar pero no se mueren, los muy hijos de mala madre. Con lo bien que esto le vendría al Mundo. Que muriesen todos. Que nos dejasen en paz. Que dejasen que cada uno creyese o descreyese en lo que le dé la real y santísima gana. Real de realidad y santísima de santo.
Están tan infinitamente ciegos, tan borrachos de soberbia que son incapaces de admitir que ellos son el problema. Ellos y sus Pollas, que no sus Libros ni sus Dioses.
Porque sus Libros son libros y sus Dioses son dioses.
Libros escritos por hombres y dioses creados por hombres. Y si existen esos dioses y dictaron esos libros dudo que su deseo fuese que nos matásemos por un quita de ahí esas letras, ese símbolo o ese ídolo.
Si de verdad el dios judeo-cristiano creó el Mundo (según el Génesis) en seis días (al séptimo se tumbó en una butaca con un botellín fresquito, que se lo merecía), me parecería increíble que después de tan Magna Obra (Opus Dei, Obra de Dios, no confundir con la secta católica) dejase que nos diésemos de leches hasta exterminarnos.
Sinceramente, si tengo que aceptar la figura de un Ser Supremo la identifico con un ente con inteligencia. No como estos "defensores" de su palabra, que carecen de ella. De inteligencia, que palabras les sobran.
La religión siempre ha sido, y sigue siendo, fuente de repuestas y de esperanza. Es útil (a algunos). Sirve a muchas personas para encontrar respuestas, para buscar un significado a sus vidas, para afrontar su destino, la muerte.
A lo largo de milenios el ser humano ha intentado hallar respuestas. Y las religiones se erigieron como primera línea de choque frente a este reto.
Algunas de estas líneas perecieron; otras siguen activas y sirven para proteger a muchas personas frente a la duda y la desazón de la razón de ser. Les sirve para explicar y sobrellevar su existencia. ¿Porqué estamos aquí? ¿Para qué?
No tengo respuestas a esas preguntas. Ni siquiera me las planteo. Sólo sé que no estamos aquí para rendir pleitesía a los terryjoneses y sinónimos. Mucho menos para morir por ellos en nombre de algo que ningún dios pronunció.
Y, sin embargo, hay muchos dispuestos a morir y matar por estos terryjoneses.
PD necesaria: Después de leer lo que he escrito aconsejo un plan alternativo (infinitamente mejor al anteriormente planteado) a quien lea esto: pasa de quemar y destruir. En el 11 - S búscate a un musulmán, un judío, un sintoísta, un nicaragüense o a un calagurritano. Y hablad.
Hablad de vuestras distintas religiones, culturas, tradiciones, creencias. Hablad de fútbol, de política o de "lomalquevaelpaís". Hablad.
La incultura y el extremismo ombliguista se cura con conocimiento, no con fuego.
Cambio y Corto Ep.02
Hace 14 años